dimarts, 26 de maig del 2015

Radiografía de los think tanks en España

En un mundo globalizado y cada vez más complejo, los laboratorios de ideas ―los llamados think tanks― se han consolidado como actores políticos relevantes a la hora de proponer políticas públicas y asesorar a los gobiernos ante nuevos retos y amenazas. La desigualdad norte-sur, la seguridad internacional, la sanidad, el orden geopolítico mundial... todas estas problemáticas deben ser abordadas con rigor, tenacidad y método. En este sentido, los think tanks son organizaciones permanentes encargadas de suministrar una producción original de reflexiones, análisis y asesoramiento, pero que no están al cargo de misiones gubernamentales. Además, su trabajo tiene, o debería tener, la ambición, explícita o implícita, de servir a una determinada concepción del bien público, por oposición a las organizaciones con ánimo únicamente comercial y lucrativo.

En este contexto, comparto con vosotros un informe que he realizado conjuntamente con el colega investigador Jaime González-Capitel titulado "Radiografía de los think tanks en España" y que la Fundación Ciudadanía y Valores ha tenido la amabilidad de publicar. 

Podéis consultar el informe completo aquí

dijous, 14 de maig del 2015

Pensando el mundo global. Think Tanks y políticas públicas

Factores de carácter global como la complejidad derivada de la globalización, el terrorismo, la crisis o la incertidumbre exigen un replanteamiento de las políticas públicas para poder dar respuesta a los nuevos retos y necesidades de nuestras sociedades. El principal desafío consiste en mitigar riesgos y agilizar la capacidad de respuesta y anticipación frente a las nuevas amenazas (innovación tecnológica, posibilidad de destrucción masiva, exacerbación del integrismo religioso, volatilidad de los mercados financieros, guerra bacteriológica, terrorismo biológico, etc.).
Las amenazas han cambiado y son más peligrosas y difusas: el enemigo actúa de manera nodal y global y los riesgos resultan más impredecibles. En este contexto, la ciencia cada vez tiene mayores dificultades para responder a los retos de las sociedades contemporáneas caracterizados por contener datos inciertos y riesgos altos y exigir decisiones urgentes. El 11-S y los posteriores atentados, la caída del banco de inversión Lehman Brothers o la reciente epidemia de ébola, son algunos ejemplos significativos.
Como decía Ulrich Beck, la experiencia del pasado fomenta la anticipación del tipo de riesgo equivocado, aquél que creemos poder calcular y controlar, mientras que el desastre surge de aquello que no conocemos y que no podemos calcular. Ante este nuevo panorama, personas y métodos deben adaptarse a los nuevos tiempos. En el ámbito de la inteligencia, se ha abogado por planteamientos integradores, globales y proactivos que permitan multiplicar las fuentes informativas para poder contrastar los datos y calibrar su relevancia; identificar, monitorizar y gestionar los riesgos desde sus fases más incipientes; desarrollar criterios organizativos flexibles para adaptarse a la diversidad de riesgos actuales; y crear nuevas herramientas teóricas, conceptuales o metodológicas y patrones de análisis transversales e integrales para comprender y neutralizar los nuevos riesgos.
En este contexto, los think tanks se presentan como actores políticos eficaces para afrontar amenazas globales y alentar intereses comunes. El reto radica en aprovechar la ingente reserva de conocimientos, información y energía asociativa que existe en las organizaciones de investigación sobre políticas públicas para apoyar su autoabastecimiento económico y social y garantizar el progreso político. Pero, ¿qué son exactamente los think tanks?

*Artículo elaborado para la colección ‘Notes internacionals’ del CIDOB. Clica aquí para leer el artículo completo.